Que la Poesía no sirva de arma para dañar
Que los versos no sean dardos envenenados
Los corazones se alejan, ¿quién puede evitarlo?
Pero quedan recuerdos dibujados en estrofas
Una vez tus ojos me inspiraron
Hubo un tiempo en que fui tu héroe
A tus ojos fallé, y lo lamento
A mis ojos perdiste tu aureola
Pero los poemas siguen corriendo por nuestras venas
Y eso hace que merezca la pena todo
Porque nuestros corazones siguen tocando música
Aun con acordes, ritmos e instrumentos diferentes
Dejemos que la música suene
Aunque ya no cantemos juntos
Y recordemos para siempre
Aquellos sones que tocamos un dia
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