martes, 12 de agosto de 2008

Corazón desorientado


Corro hacia el horizonte del amor

Leguas de tierra yerma han encallecido mis pies

Desiertos, montañas, rios y bosques

Persiguiendo el ocaso de unos besos


He nadado por océanos helados

Infestados de los monstruos del desánimo

Tempestades de celos, huracanes de ignorancia

Solo para alcanzar un cálido “Te amo”


Pero la Tierra es redonda, y el horizonte inalcanzable

Nadie nunca caminó por esa línea

Tus labios son pequeños, finos y rojos

Como el filo de una navaja ensangrentada


Ahora volveré sólo a mi casa

Allí donde tengo mi tristeza

Desplegare mil lagrimas en un tablero

Piezas que forman mi corazón destrozado

No hay comentarios: